“La investigación no está cerrada. Seguimos trabajando y, pese a que hay personas que piensan que se terminó el caso, todavía no se descarta nada”, aseguró el fiscal Diego López Ávila -quien se encuentra al frente de la la pesquisa que busca conocer la causa de muerte del padre Juan Viroche- en una charla exclusiva con LA GACETA.
- ¿Está descartado el crimen?
- Todavía no. Debo recibir todos los resultados que ordené que se hicieran para ser terminante.
- ¿Y el suicidio?
- Tampoco y, por supuesto, si fue inducido o no. Si bien hay indicios, todavía no puedo afirmar que sean pruebas firmes. Hay que seguir esperando.
- ¿Se sabe de las amenazas, pero ya determinó quién las hizo?
- Aún no. Estamos esperando los resultados de las empresas de telefonía para identificar a los que las hicieron. Además, el análisis de los mensajes los harán los especialistas de una fuerza nacional.
- ¿Qué tipo de amenazas detectó?
- No puedo informar más detalles, aunque creería que no son de tinte mafioso o, por lo menos, no es lo que acostumbran hacer.
- ¿Qué medidas se están esperando ahora?
- Los resultados de los análisis genéticos. Se han enviado muestras tomadas del cuerpo, de la linga y de las prendas que tenía puestas. Otro estudio que considero clave es el de la sangre que se encontró en la iglesia. En los próximos días se enviará a Salta muestras de orina para que se realicen un estudio toxicológico y otros que nos pueden precisar con mayor exactitud la hora en que murió el cura.
- ¿Para qué servirán?
- Me interesa determinar si hubo otra persona en el lugar. Y esos análisis son claves, ya que se podría confirmar el informe que realizó la Policía Científica y los peritos del Poder Judicial.
- ¿A qué conclusiones llegaron con esos estudios?
- Ambos coinciden que no hay signos de que haya una lesión defensiva, es decir, que en principio no peleó con nadie antes de perder la vida. Los informes periciales tampoco indican que otra persona pudo haber estado en ese lugar.
- ¿No son concluyentes esos resultados?
- No. Me falta recibir los informes finales del médico forense de Gendarmería Nacional. De todas maneras, por las radiografías seriadas que se le hicieron al cuerpo de Viroche se podría descartar que haya sufrido golpes, especialmente fisuras en las costillas y otras lesiones del cuerpo. Además, el criminólogo (Raúl) Torre enviará las conclusiones cuando haya analizado todo los informes periciales que se están produciendo.
- ¿Y la autopsia psicológica?
- Es clave, pero habrá que esperar. Por protocolo se debe aguardar por lo menos seis meses para comenzar a hacerla. Luego se entrevistan a las personas que puedan dar su testimonio y recién los especialistas sacan sus conclusiones. Estimo que el resultado de esta pericia no estará hasta dentro de nueve meses. En principio será realizada por personal del poder Judicial y de la Policía Judicial de Córdoba.
- Se habló mucho sobre unas supuestas lesiones que tenía en el pecho.
- Son especulaciones inventadas por las fotos que se viralizaron. Esas marcas son manchas de sangre que quedaron impregnadas en el cuerpo. La remera que tenía puesta estaba manchada con sangre.
- ¿Qué opina de las hipótesis que se elaboran en la calle y que no tienen nada que ver con lo que aparece en el expediente?
- La verdad es que no las entiendo. Pareciera que son realizadas por personas que, a lo mejor, tienen intereses particulares. Muchas veces creo que hay personas que no quieren que se sepa la verdad. Y, pese a que le moleste a muchos, estamos trabajando para llegar a la verdad.
- ¿Es consciente de los cuestionamientos de la opinión pública?
- Yo sigo adelante con mi trabajo que consiste en primer lugar determinar si estamos ante un ilícito o no. Es imposible exigirle a la Justicia que informe cuál es el resultado de la investigación porque se está trabajando en ello. Es evidente que hay personas que están tratando de instalar una idea que no es la real. Desconozco cuáles son los motivos, pero alguna intencionalidad tienen.
“Me molestó muchísimo que se hayan viralizado esas imágenes. Pero más me irritó que medios de comunicación las hayan utilizado modificadas para generar la idea de que la muerte de Juan Viroche está relacionada con el crimen”, indicó el fiscal Diego López Ávila.
- ¿Sabe por qué se hizo eso?
- Es evidente que esas imágenes fueron utilizadas para instalar una idea diferente. Me pareció correcto que LA GACETA haya decidido no difundirlas, pero es lamentable que otros medios no lo hayan hecho. Es doloroso observar qué hicieron con esas imágenes. Por eso también inicié una investigación para determinar cómo se filtraron.
- ¿Por qué insiste tanto con encontrar a los culpables?
- No sólo porque se buscó modificar la realidad, sino porque no tuvieron respeto con la familia Viroche. Lo revictimizaron de una manera cruel y espantosa. Y aclaro, esto no sólo lo digo por esta familia, sino por cualquier otra que viva una situación similar. Hay que ser más responsables.
- ¿Cómo es su relación con la familia del sacerdote?
- Es perfecta. Por lo que me transmite su representante legal (Pedro Escobar) están muy conformes con el trabajo que estamos realizando.
- A usted se lo cuestionó por haber investigado la vida privada.
- Nuestra misión es buscar la verdad objetiva. Y para cumplir con ese objetivo debemos investigar todo. Ellos quedaron conformes porque les avisé lo que estaba haciendo y, cualquier dato que salía a la luz, se los informaba personalmente a ellos o se los comentaba a su representante legal. Desde un primer momento dije que no daría opiniones ni difundiría datos de la vida privada y es lo que estoy haciendo.
- Sin embargo no cesan las críticas en su contra.
- Entiendo que en este caso hay un contenido religioso muy importante y eso puede generar algunos inconvenientes en lo que se refiere a la percepción de las cosas. Lo comprendo y lo respeto, pero mi misión es buscar la verdad y eso haré hasta el final de esta causa. Lamento que haya personas que no lo entiendan así y que hagan lo imposible para desviar la atención.
- ¿Quiénes son?
- Está claro que hay personas que responden a algún interés particular o que responden a alguien. Es la única manera de entender qué realizan comentarios desde las 6 de la mañana hasta las 1. Eso es totalmente anormal.